Frederick
Manion (Ben Gazzara), un teniente del ejército, asesina fríamente al presunto
violador de su mujer (Lee Remick). Su esposa contrata como abogado defensor a
Paul Biegler (James Stewart), un honrado hombre de leyes. Durante el juicio se
reflejarán todo tipo de emociones y pasiones, desde los celos a la rabia.
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James Stewart
y su equipo, un viejo borrachín, y una sarcástica secretaria; contra un fiscal
reforzado por un afamado hombre de leyes. El protagonista no pasa por su mejor
momento profesional, y, sorprendentemente se hace cargo de un caso claro de asesinato.
Pero la justicia es muy voluble, y, unas cuantas triquiñuelas pueden dar la
razón a los criminales.
Sabemos desde
el principio que es culpable, no tenemos dudas; y sin embargo, nos ponemos en
contra de la antipática acusación.
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Entre
chascarrillos se desarrolla un juicio repleto de tretas. Vence la injusticia, y
aun así terminamos con una sonrisa.
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Brillante
Stewart, como de costumbre. Sensual y, a veces, rozando la ingenuidad, Lee Remick.
Personajes, todos ellos, de gran calado. Notas de jazz para una muestra de cine
negro, con un tratamiento legal atípico.
Título original Anatomy of a Murder. Director Otto Preminger.
Guión Wendell Mayes
(Novela: Robert Traver). Música Duke Ellington. Fotografía Sam Leavitt
(B/N). Reparto James Stewart, Lee Remick, Ben Gazzara, Arthur O'Connell, George C. Scott, Eve Arden, Kathryn Grant, Joseph N. Welch, Duke Ellington.
EE UU 1959, 160
min. Premios: Festival de Venecia: Mejor actor (James Stewart). Círculo de Críticos de
Nueva York: Mejor guión y actor (James Stewart).
2 comentarios:
Que tal Lu,
No se si existe el sub-genero "juicios", pero desde luego yo la situaría entre las mejores. Una estupenda película para ver a cualquier hora, fantástico el sello de Saul Bass en los tirulos de credito.
Cuando en alguna peli aparecen connotaciones sexuales siempre compruebo viendo la escena de nuevo -en este caso doblada al castellano- como en aquel tiempo la censura maquillo la situación. No recuerdo exactamente el momento pero en este film hay un par de detalles curiosos al respecto.
Un saludo!
Fran, no lo he puesto en palabras, pero sí en la primera imagen, y esos esos créditos son geniales, algo que con frecuencia no se cuida ni lo más mínimo.
Lo sexual y la censura…. Todo un universo que ha provocado verdaderos desastres. En este caso puede pasar un poco más desapercibido por lo ligera que es, lo poco explícita 8unos gestos y un vestuario, pero poco más). Parece que al padre de James Stewart le pareció muy subida de todo… Es muy divertida la escena en la que el juez busca un sinónimo para las bragas porque sabe que va a provocar risas y carcajadas en la sala….
Bicos
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