viernes, 31 de diciembre de 2010

Habitación en Roma


DIRECTOR Y GUIONISTA Julio Medem
REPARTO Elena Anaya, Natasha Yarovenko, Enrico Lo Verso, Najwa Nimri
MÚSICA Jocelyn Pook, Russian Red
FOTOGRAFÍA Álex Catalán
España 2010, 109 min.
WEB OFICIAL
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De antemano decir que soy de esas incondicionales de Medem a las que ciertos críticos muy entendidos incluyen en una especie de secta de borregos con ínfulas de intelectualidad.

Algunas de sus películas me parecen sencillamente sublimes. Otras más flojas y una en concreto, mala. Creo que mi cerebro todavía es capaz de saber si algo me gusta o no, lo firme quien lo firme.

Antes de ver esta película leí varias críticas y eran todas sacadas de la misma cocina, plato precongelado y cargado de prejuicios.

Primero vi En la cama, del chileno Matías Bize, que me encantó. Y ésta es la personal visión de Medem, con toques muy propios de su trayectoria cinematográfica. Son alternativas diferentes.


Dos mujeres se conocen una noche de copas y acaban pasando unas horas en la habitación de un hotel de la capital italiana. En ese breve encuentro viven experiencias muy intensas. Juegos sexuales, seducción y desabrimientos, forman parte de lo físico, del punto de partida. Cada una va desvelando aspectos importantes de su propia vida, lejos de esas paredes. Las conversaciones basadas en mentiras y miedos van dando paso a las verdades difíciles de asumir, y más de expresar en palabras. Emociones, afectos, pasión, destino y amor.


Me ha gustado. Reconozco a Medem en muchas de las escenas, en como nos las presenta. No considero que se pueda incluir dentro de sus mejores propuestas, pero sí que se aprecia un paso hacia delante. Con su simbolismo, sus referencias artísticas, su utilización de la luz (ese amanecer sobre los lienzos y ellas de blanco en el baño, la penumbra, las lámparas) y los espacios, la música que aparece en los momentos exactos. En cuanto a las actrices, lo hacen bastante bien, sobre todo Elena Anaya. Aunque no alcanza el grado de intensidad emocional que se le presupone a esta historia, sí que consigue crear intimidad y complicidad.





Coincido plenamente con las entradas de Troyana y Xalons.





HACE UN AÑO Y UN DÍA: Take Hawai shows + Para olvidar

HACE UN AÑO: Dos erizos

miércoles, 29 de diciembre de 2010

Chapuzón, Amman, Ajlun y Jerash

El cansancio se apodera de mí al llegar al hotel, donde entrar en nuestra habitación no va a ser tarea sencilla. Primero nos dan una ya ocupada (tremendo susto a los españoles que allí duermen, irrumpiendo en sus dulces sueños); y después la tarjeta de acceso no abre. Una vez dentro (ha transcurrido más de media hora), bajamos a por el desayuno, una reconfortante ducha y, pertrechados con bañador y toalla, nos disponemos a iniciar una “dura” jornada de turismo.

A 50 km de Amman, o lo que es lo mismo, unos 45 minutos en coche, nos dirigimos a la playa (privada, con piscina y duchas) número dos. Estamos en el punto más bajo de la tierra, el Mar Muerto a más de 400 metros por debajo del nivel del mar. Lo peor es que sigue descendiendo. Enfrente, Jericó y Jerusalén.

El agua que impide el desarrollo de cualquier ser viviente, por su elevadísima proporción de sal (30%, 10 veces más de lo habitual); sin embargo parece ideal para el cuidado de la piel: unos minutos de inmersión, equivalen a rejuvenecer meses e incluso años (Cleopatra ya lo sabía). Lo que es indudable es la extraordinaria sensación que se apodera de todo el cuerpo, empeñado en flotar. Girar o cambiar de posición son sinónimo de patosos ejercicios gimnásticos. Qué risas!!!

Imprescindible pasar por la tienda de productos especializados para poder compartir con tu familia y amigos los secretos de belleza, en forma de barros y cremas. (Más barato en el aeropuerto, o incluso comprados desde España a través de varias webs que te lo entregan en casa, 24 horas después de realizar el pedido, sin necesidad de reventar la maleta). Tus seres queridos te lo agradecerán igual.

Antes de las cinco anochece, y somos testigos de una luz de atardecer deliciosa sobre el desierto, camino de la capital, que se desliza entre colinas.

Si complicado fue entrar en el hotel, no va a ser distinto salir caminando. A través del decampado, cual cabras montesas, nos dirigimos a reconocer la zona, sus tiendas (pastelerías de cuento y especias en etéreas pirámides, coloristas y aromáticas. Orienta cautiva nuestros sentidos) y su tráfico sofocante.

Nos merecemos un premio: una Amstel (a precio de barril de petróleo), aderezada con exquisitos frutos secos.

Qué bien me siento después de un reconfortante sueño (como un lirón). Segundo día, panorámica de la ciudad bajo la lluvia, viento y niebla (es la primera precipitación de la temporada, qué suerte tenemos!).

Diferentes barrios de construcciones bajas, el Downtown, la mezquita azul con dos iglesias al lado. La mayoría de los jordanos (90%) son musulmanes.

Ciudadela, ruinas la antigua ciudad. El Templo de Hércules, erigido en honor de Marco Aurelio, y los restos de una iglesia bizantina. Museo arqueológico, con los manuscritos del Mar Muerto.

Teatro romano en perfecto estado de conservación. Museo de las tradiciones populares.

Castillo de Ajlun de la época de los cruzados, con buenas vistas (ya está despejando), y un recinto reconstruido sin gran interés.

Casi 2 horas hasta Jerash (la Pompeya del este), ciudad greco – romana que nos brindará un atardecer de lujo para poder disfrutar de la Puerta de Adriano, el Hipódromo, el Cardo Máximo, el Templo de Zeus y el de Artesima. Anochece mientras escuchamos tambores y gaitas en el teatro sur.

Foro oval o ágora adoquinado, con su columnata completa



Ninfeo











HACE UN AÑO: Yasujito Ozu

martes, 28 de diciembre de 2010

Fronteras, tejo y Tolstoi

Aquí es mi casa - Jerome Ruillier

Un precioso cuento que llega a mis manos por casualidad.


El niño ha dibujado una línea con tiza
¡Detrás de esta línea es su casa!
Un lugar donde nadie puede entrar
Pero el conejo, el caracol, la hoja del árbol
Y las nubes se ríen de las fronteras…

Memorias de un árbol – Guido Mina di Sospiro

Una eco – fábula.

Un árbol majestuoso y milenario explica su propia vida. Es la reina del bosque, un ejemplar femenino de tejo, testigo y protagonista de dos mil años de historia. Desde su isla verde es espectadora de los ritos animistas de los celtas, y asiste impotente a la invasión de una nueva religión, el cristianismo, que abandona el culto a las plantas y los animales. Con el paso de los siglos, la historia de la humanidad y de todos los seres vivos se refleja en la de ese pequeño bosque. Finalmente, hoy, ese árbol, protegido y venerado como símbolo de resurrección e inmortalidad, puede lanzar su mensaje de paz y armonía a todas las criaturas.Aclamado por la crítica de Estados Unidos y de Italia, Memorias de un árbol inaugura un nuevo género literario. Su autor se convierte en portavoz de un ser inanimado. Gracias a largos años de estudios e investigaciones, así como a la colaboración de algunos de los más prestigiosos botánicos y naturalistas de nuestro tiempo, esta historia es la fusión de la ciencia de vanguardia con la sabiduría de las antiguas tradiciones.

Una niña habla de ella con admiración y asegura entender el lenguaje de los árboles, lo que lleva al tejo a expresar cierto optimismo:

En ella detecto el alba de una sensación de esperanza; esperanza en la raza humana como una raza verde, una raza amable. Desde aquel momento mis esperanzas se han visto defraudadas más de una vez, pero al menos tenía pruebas de que un corazón humano podía albergar sentimientos de amor, sobre todo cuando latía pacíficamente en el pecho de una mujer. Está claro que millones de años de procreación, cría y protección de sus pequeños no podían olvidarse. Del mismo modo que el millón de años que los hombres llevan cazando, luchando, matando y depredando el planeta, tiene consecuencias para ellos.

Una columna de Juan José Millás que leo esta misma mañana en el tren.

Cosas que no cierran

Publicada en Faro de Vigo

Te despiertas a las tres de la madrugada, por poner un ejemplo, y el insomnio te expulsa de la cama. ¿Qué hacer, ir a dar una vuelta por El Corte Inglés? A esas horas no funciona. Quizá puedas asomarte a sus escaparates. Tal vez, haciendo visera con las manos, seas capaz de columbrar el fondo de la tienda y distinguir, en la penumbra, las siluetas de los maniquíes y las maniquíes. Puedes dar las vueltas que quieras alrededor del edificio sin hallar una rendija por la que introducirte en él para olvidar tu insomnio. Pero lleva cuidado, no hay nada más sospechoso para los demás y para uno mismo que un merodeador nocturno. Si pasa por allí un coche de la policía, te interrogarán, aunque no hayas hecho todavía nada malo.

– Es que estaba insomne.

– ¿Y por qué no se ha tomado una pastilla?

Quien dice El corte Inglés dice la tienda de los chinos de la esquina, carrada también a esas horas. Ahora bien, tú te despiertas a las cuatro de la mañana y en vez de acercarte a El Corte Inglés, te dices: Voy a dar una vuelta por el interior de Ana Karenina. Ningún problema. Te acercas a la librería del salón, buscas el volumen, lo abres con naturalidad y te das una vuelta por los pasillos y las habitaciones de la obra maestra de Tolstoi. Quiere decirse que los libros, pese a tener puertas y contrapuertas, no cierran jamás. A cualquier hora del día, en cualquier día del año, puedes darte un paseo por los vericuetos mentales de Raskolnikof, el personaje de Dostoievski, como el que al mediodía recorre los pasillos de un supermercado. Si lo piensas, resulta prodigioso.

Hay más cosas que no cierran nunca. La TV, por ejemplo. Pero la TV de la madrugada da un poco de miedo. La he visto en los hoteles, cuando estoy fuera de casa y me acuesto tarde y desvelado. Da miedo, decíamos. La imagen de un hombre o de una mujer sentados frente al televisor a esas horas es un poco terrible. Cuando a Vargas Llosa le anunciaron la concesión del Nobel, era muy temprano (las seis de la mañana, creo), pero él estaba despierto y dentro de un libro, como Dios manda. Si hubiera estado viendo la tele, no le hubieran llamado.




HACE UN AÑO: Time-lapse

lunes, 27 de diciembre de 2010

Trauma, desapego y Asperger

Passengers (Rodrigo García, EE UU 2008)

La traje a casa porque la firmaba Rodrigo García, y ya he hablado en un par de ocasiones de este director y de muchos de sus detalles que me gustan.

Historia de un grupo de supervivientes de un accidente aéreo. Terapia de grupo y afrontamiento del trauma. Misteriosas desapariciones… Al menos todo esto es lo que se puede leer en la contraportada del DVD.

Con un guión nefasto, pegotes plagiados que no encajan ni con super glue… Insufrible, vaya.


La nana (Sebastián Silva, Chile 2009)

Es la triste vida de una mujer totalmente desarraigada. Lleva años sirviendo en casa de una familia, como interna, y entre esas paredes se acaba su mundo. Cada vez que se siente amenazada, estalla y se comporta de un modo incomprensible para quienes la conocen. Hasta que aparece una mujer que la ayudará en las tareas domésticas y le brindará su amistad y su afecto.

Carece de interés y abusa del sentimentalismo. El final es lo mejor.



Mozart y la ballena (Peter Naess, EE UU 2005) Crazy in love.

Les une el autismo y las dificultades que tienen para relacionarse con los demás e integrarse en el mundo, para ellos, tan complejo. Los dos protagonistas, ambos personas con Asperger, intentan formar una pareja más o menos convencional. Basada en hechos reales.

No la considero una buena película, pero refleja bastante bien algunas de las características de este tipo de discapacidad y las conductas más comunes y desajustadas: la pasión por los números que a la vez sirven como bálsamo en los momentos de descontrol, el almacenamiento ritual de todo tipo de objetos, el arte como vía de escape, reacciones ante eventos estresantes y la rutina como fuente de seguridad.

Me tomo todo al pie de la letra.

Hace unas semanas en Zinefilaz, Bruja Truca le dedicó una entrada muy interesante a la discapacidad en el cine.





HACE UN AÑO: El rumor de la arena

sábado, 25 de diciembre de 2010

Rabia


DIRECTOR Sebastián Cordero
REPARTO Martina García, Gustavo Sánchez Parra, Concha Velasco, Icíar Bollaín, Àlex Brendemühl, Fernando Tielve, Yon González, Xabier Elorriaga
GUIÓN Sebastián Cordero (Novela de Sergio Bizzio)
MÚSICA Lucio Godoy
FOTOGRAFÍA Enrique Chediak
España – México - Colombia 2009, 95 min.
Premiada en los festivales de Toronto, Tokio y Málaga.
Página oficial


Se conocen desde hace poco tiempo, ambos son inmigrantes latinoamericanos en España. Ella trabaja de empleada del hogar para un matrimonio que vive en una gran casa, él en la construcción. El chico es muy vulnerable a las miradas e insultos, y reacciona con violencia; le despiden y de forma accidental mata al capataz de la obra. Desesperado, huye y se esconde en el desván de la mansión, sin que nadie lo sepa. Desde allí será testigo del interrogatorio policial, de las miserias familiares y los peligros que acechan a su chica.

Producida por Guillermo del Toro, quien ya había colaborado en el segundo trabajo del director ecuatoriano. A destacar la brillante fotografía que refuerza el importante protagonismo de la casa, generando un ambiente de máxima claustrofobia.

Mantiene la tensión a lo largo de todo el metraje. Las actuaciones son correctas y el resultado es óptimo. Sin ser excelente, entretiene, y aporta una interesante propuesta que se mueve entre la crítica social, el melodrama romántico y el cine de terror.



Esta semana en Zinefilaz, os hablo de una interesante película ecuatoriana: Qué tan lejos.




HACE UN AÑO: Piedad – Miguel Mena

miércoles, 22 de diciembre de 2010

Reino hachemita

El último paréntesis del año, festivos colocados estratégicamente que invitan a disfrutar de una semana completa de vacaciones. Decisiones rápidas que invalidan todos los planes anteriores.

Viernes 3 por la tarde y la maleta sin hacer. Repaso de lo necesario, y susto al no encontrar el bono canjeable de la agencia. Corriendo y forzando su horario de apertura, cruzo la puerta cuando apenas faltan unos minutos para el cierre (detesto hacer este tipo de cosas). Salgo más tranquila con mi papel y sello, y sin prestar mucha atención a ciertos problemas con los vuelos de esa noche.

Un par de conversaciones telefónicas y como una posesa me lanzo a por el mando a distancia y pongo CNN+ en la tele. Me lo cuentan y no soy capaz de asimilarlo: el espacio aéreo español cerrado. No lo entiendo, ¿qué quiere decir eso? Será una broma, aunque no lo parece. Jodidos controladores, ya la están liando una vez más. Van pasando las horas, noche cerrada y consigo contactar con la compañía aérea. Parecen bastante optimistas, estiman que a las 7 de la mañana todo se habrá solucionado, y yo parezco boba porque quiero creérmelo. Apago la caja tonta que me pone muy nerviosa con ese aire catastrofista. No puede ser…

Cierro la maleta, porque yo me marcho, aunque sea andando… e intento dormir un poco. Llamada de madrugada a Air Europa, siguiendo las instrucciones de AENA. Contestador automático que me informa de que no tendrán novedades hasta después de las 7 de la mañana. En las respectivas webs poco que añadir. Un taxi y al aeropuerto con la total certidumbre de que no volaremos. Nos envían directamente a una cola de reclamaciones – recolocaciones – canjes… Casi dos horas de espera, haciendo amigos a la búsqueda de soluciones comunes, un coche de alquiler un taxi compartido, hay que llegar a Madrid como sea. Es nuestro turno y nos ofrecen cambiar el vuelo para las 3 de la tarde, pero sin garantía de ningún tipo. Imposible, tenemos una conexión a las 5 desde Barajas. Cancelamos ese tramo de ida a la capital, conservando la vuelta, y nos vamos con un papelito que nos asegura el cobro de la parte proporcional.

La diosa fortuna nos quiere y pone en nuestro camino a una amiga que esa misma mañana se marcha a Madrid en coche. Un café para templar la rabia, mails a la agencia y teléfonos que siguen sin aportar nada nuevo.

600 kilómetros de carretera con la oreja pegada a la radio, estado de alarma, militares (es más grave de lo que podíamos imaginar). Más de 600 mil persona afectadas. La han liado gorda estos tipejos. El móvil no cesa de sonar, pero las certidumbres son nulas. A medio día, la mayorista me asegura que volamos esa noche a las 21 horas.

Entrada a la T4, más medios de comunicación que pasajeros. Aparecemos en pantalla y abren la facturación. Tren al satélite de la Terminal, mientras desde megafonía Iberia anuncia una y otra vez que se reanudarán sus salidas a partir de las 6 del día siguiente. Esto se pone feo. Larga espera hasta el momento señalado, 23 horas. Y de pronto desaparece el vuelo en pantalla, aunque pocos minutos después se anuncia una puerta de embarque hacia la que corremos.

LO CONSEGUIMOS, más de 7 horas de retraso, pero nos montamos en el avión y despegamos rumbo a Amman. Posteriormente sabremos que fuimos unos privilegiados, de los primeros en salir ese día.

Aterrizamos de madrugada, trámites y al hotel, un buen desayuno, una ducha reconfortante y comienza la ruta jordana.

Flotando sobre las aguas del Mar Muerto, qué divertido!!! Merecido relax.

Ciudadela

Museo arqueológico

Teatro romano

¿Un café con cardamomo?

Vistas desde el Castillo de Ajlun





lunes, 20 de diciembre de 2010

Soy un gato – Matsume Sōseki


Soy un gato, aunque todavía no tengo nombre. No sé dónde nací. Lo primero que recuerdo es que estaba en un lugar umbrío y húmedo, donde me pasaba el día maullando sin parar. Fue en ese oscuro lugar donde por primera vez tuve ocasión de poner mis ojos sobre un espécimen de la raza humana. Según pude saber más tarde, se trataba de un ejemplar de lo más perverso, un shoshei, uno de esos estudiantes que suelen realizar pequeñas tareas en las casas a cambio de comida y de alojamiento. En algún sitio he escuchado incluso que, en ocasiones, esos crueles individuos nos dan caza y nos guisan, y luego se nos zampan. Aunque he de decir que, debido quizás a mi ignorancia y a mi poca edad, no sentí nada de miedo cuando lo vi. Simplemente noté que el shoshei en cuestión me levantaba por los aires en la palma de su mano, y que yo me sentía flotar. Una vez me acostumbré a esta novedosa perspectiva, tuve ocasión de estudiar tranquilamente su rostro. El sentimiento de extrañeza todavía permanece en mí hoy en día. En primer lugar hablaré de su cara: por lo que yo sabía, las caras de todo bicho viviente suelen estar cubiertas de pelo. Sin embargo, la suya estaba lisa y pulida como la superficie de una tetera. He conocido a lo largo de mi vida a muchos gatos, de orígenes diferentes, pero ninguno tenía una deformidad como la de ese tipo. Pero no sólo era eso. Había más. El centro de su rostro estaba ocupado por una enorme protuberancia, con dos agujeros en medio por los que, de vez en cuando, emanaban pequeños penachos de humo; algo que consideré ciertamente sofocante y fastidioso. Durante un rato me sentí enfermar por causa de esas asfixiantes exhalaciones. Ha sido sólo recientemente cuando he aprendido que aquel humo era producido por el tabaco, una cosa que, por lo visto, a los humanos les pirra.
Primer capítulo
Hay que reconocer que el libro entra directamente por la vista, cual plato goloso. Este singular peludo aterriza en la vivienda de un extravagante maestro y allí se quedará para ser testigo de las costumbres y charlas más variopintas: las constantes bromas del amigote charlatán, las trifulcas del matrimonio o el amigo que día y noche se dedica a pulir bolas de cristal para su tesis doctoral. Observador, va desgranando sus profundas impresiones sobre la conducta del ser humano. Con mucho humor, crítica, cultura, gastronomía y pensamiento budista, este texto publicado por primera vez en 1905, es un tesoro rescatado de la literatura japonesa, que me ha hecho pasar excelentes momentos, que me ha cautivado por completo y con el que me he reído bien a gusto.

Un gato que no caza, aunque en una ocasión lo intenta con un resultado lamentable (ese pasaje es increíble y tan divertido). Tampoco se caracteriza por vigilar la casa, un ladrón campa a sus anchas, llevándose un botín peculiar. Un felino sin nombre y con mucho que contar.




HACE UN AÑO: Swing

sábado, 18 de diciembre de 2010

Tres monos



TÍTULO ORIGINAL Üç Maymun
DIRECTOR
Nuri Bilge Ceylan
REPARTO Yavuz Bingöl, Hatice Aslan, Ahmet Rifat Sungar, Ercan Kesal, Cafer Köse, Gürkan Aydin
GUIÓN Nuri Bilge Ceylan, Ebru Ceylan, Ercan Kesal
FOTOGRAFÍA Gökhan Tiryaki
Turquía-Francia-Italia 2008, 109 min.
Festival de Cannes: Mejor director




El dinero evita la cárcel del político ambicioso. Ese mismo dinero pone en su lugar al chófer dispuesto a permanecer callado y entre rejas durante un año. En ese tiempo su hijo y su mujer le mienten, y cuando al fin sale en libertad, la situación que viven se vuelve insostenible y la tragedia es inevitable.



Se trata de una propuesta arriesgada, donde los sonidos, los rostros, la utilización del color y la fotografía crean un ambiente asfixiante. El último tramo pesa como el plomo y la sensación global es de estar ante una película rara. Visualmente espectacular.


Esta semana en Zinéfilaz, todo un clásico, West side story



HACE UN AÑO: Castillos de cartón
Seguramente la entrada más polémica de este blog, al menos para quien buscaba cizaña.

jueves, 16 de diciembre de 2010

El soplo al corazón


No existe culpa ni pecado. El hedonismo vitalista del film, el pudor delicado en el tratamiento de los desnudos, el respeto de la mirada del cineasta, la calidez fotográfica, la dulzura musical y la verdad que transmiten los actores convierten un tabú en un acto de amor cinematográfico. (Diego Moldes, del libro El cine europeo. Las grandes películas).

TÍTULO ORIGINAL Le souffle au coeur
DIRECTOR Y GUIONISTA
Louis Malle
REPARTO Lea Massari, Benoît Ferreux, Daniel Gélin, Michel Lonsdale, Ave Ninchi
MÚSICA Charlie Parker, Sidney Bechet
FOTOGRAFÍA Ricardo Aranovich
Francia - Italia1971, 115 min.
Nominada al Oscar: Mejor guión original

Resulta una tarea muy complicada tratar temas como el incesto sin provocar polémica. Aunque supongo que aquí se muestra sobre todo el despertar sexual de un adolescente, menor de tres hermanos, con una madre muy atractiva; iniciación en un burdel e insinuación de un sacerdote. ¿Quién da más?

No me ha gustado demasiado.



HACE UN AÑO Y UN DÍA: La fórmula preferida del profesor – Yoko Ogawa

HACE UN AÑO: Risoterapia

martes, 14 de diciembre de 2010

Mejor con una canción


A veces las cosas no son como esperamos:

Pagafantas (Borja Cobeaga, España 2009). El título no engaña. Compendio de expresiones útiles y provechosas: hacer una cobra, abrazo de koala y pagafantas (léase con tono despectivo). Amor juvenil con toques de humor (amagos). Vista un domingo por la noche con el cuerpo muy cansado y la mente bajo mínimos, y casi olvidada antes de empezar esta entrada tan breve.


Animales tristes – Jordi Puntí

Relatos sobre las relaciones de pareja donde se entrecruzan algunos de los personajes. Desde las primeras páginas tuve el presentimiento de que no me iba a gustar, y la verdad es que lo terminé con esa misma idea, pero llegué hasta el final y no sé muy bien el motivo.

Siempre me ha disgustado la plácida forma de morir que tienen los recuerdos.

Pero siempre queda una canción o un grupo que surge de pronto y pone la banda sonora a una tarde soleada de finales de otoño.







HACE UN AÑO Y UN DÍA: Rec


HACE UN AÑO: Quiero ser como Beckham

domingo, 12 de diciembre de 2010

Momentos felices

Domingo para deshacer la maleta, para dormitar, para volver lentamente a la realidad, para recrearse en lo vivido en estos días de vacaciones, el último paréntesis del 2010.

Y las calles iluminadas porque se acerca la navidad.


Letra de la canción



HACE UN AÑO Y SIETE DÍAS: La joven de la perla

HACE UN AÑO Y CUATRO DÍAS: Días del cielo

HACE UN AÑO Y TRES DÍAS: En pocas palabras

HACE UN AÑO Y DOS DÍAS: Chesil Beach – Ian McEwan

HACE UN AÑO: La ventana de enfrente

jueves, 2 de diciembre de 2010

Mensajeros de la oscuridad - Alicia Giménez Bartlett

Tercera novela de la saga de Petra Delicado, y primera que leo yo (lo mío nunca fue el orden cronológico). Ya desde las páginas iniciales impacta el asunto que investigarán esta inspectora y su ayudante (menos mal que iba avisada por un comentario en el blog de Noemí). Petra asiste a un programa de televisión y como consecuencia de su aparición “estelar” recibe numerosas cartas. Entre el correo, aparece una cajita, y al abrirla se queda totalmente pasmada (y quién no). Recibirá más envíos similares con extrañas pistas que la conducen al comercio de velas, a una cantera, a hablar con un experto en sectas e incluso al gélido Moscú.

Garzón y ella forman una pareja policial ya muy consolidada, ella manda, él obedece. Se aprecian y respetan.

Me ha gustado mucho, así de simple. La acción contiene muchos elementos de intriga y los personajes desde el ámbito profesional y personal, enriquecen la trama, con las fantasías sobre las alternativas de vida de futuro en pareja de Petra, que busca la felicidad:

La felicidad consiste en no preguntarte durante la vida cotidiana si eres feliz.

Un buen día un hombre a quien apenas conoce, le desvela en cuatro frases ese tipo de cosas que no nos gusta escuchar, y nos cuesta asimilar:

No pasa absolutamente nada, Petra. Todo está bien. La sensación que tienes es el resultado de darte cuenta de que no eres como creías ser: arriesgada, anárquica, amante de los cambios. ¿Has pensado que tu verdadera naturaleza estriba en el orden, la inmovilidad, el racionalismo más absoluto?

Vaya, vaya. ¿Riesgo, aventura, vida apasionada, o tranquilidad, seguridad y control?

Una mezcla explosiva de momentos de humor, de reflexión, escenas macabras y cuerpos destrozados, escarceos y sexo; imposible aburrirse.





HACE UN AÑO Y UN DÍA: Napola