Cristina Sánchez-Andrade
El niño que comía lana
Colección de relatos
Una autora que no conocía.
Una voz potente e impactante. Una lectura sensitiva, a ratos perturbadora. Me
ha sorprendido.
Sinopsis: Un niño
traumatizado por la desaparición de su cordero empieza a comer lana, que vomita
en forma de bolas; un ama de cría sueña con emigrar a América mientras mantiene
la leche utilizando a un perrito; a un marqués le proporcionan dentaduras
postizas de dudosa procedencia; a un niño le extirpan las amígdalas, que acaban
convertidas en trofeo; un náufrago logra sobrevivir gracias a un secreto
inconfesable; una anciana toma una decisión inaudita tras la muerte de su
marido; un oficinista selecciona por catálogo a una novia que al final resulta
no ser la mujer con la que soñaba... Estos son algunos de los estrafalarios
protagonistas de los jugosos cuentos reunidos en este volumen.
Moviéndose entre lo macabro y
lo irónico, entre la fábula y el esperpento, el realismo más crudo y la
fantasía más desaforada, estas historias son una excelente muestra del
particular, inimitable y estimulante universo literario de Cristina Sánchez-Andrade.
En ellas asoman la Galicia rural, la España profunda, los escenarios de
sainete, los personajes estrambóticos y las situaciones imposibles. Aparecen la
muerte, el sexo, la codicia, las ensoñaciones, los engaños y los desengaños,
pero también algún que otro crimen, toques grotescos, pinceladas macabras y un
humor peculiarísimo, descacharrante y a veces perturbador.
Nº de páginas: 216. Editorial
Anagrama 2019. Primeras páginas.
Llenos los niños de árboles
Poesía
No soy asidua a los versos.
Con este libro me he relajado, me he evadido, me ha perturbado, he parado, y al
releer algunos poemas he pensado y he sentido.
Me dijo:
estás envejeciendo
Tú y lo que te asusta
estáis envejeciendo
+++
El viento muge en la
oscuridad y hay árboles que crecen en los niños.
La luz de sus dientes nos
impide dormir.
+++
Desear que las moras crezcan
y envejezcan en las zarzas
Saber que algún día habrán de
madurar,
y que el sabor nunca será tan
bueno,
ni tan dulce
como el pensamiento de la
mora.
+++
me gustaría ser
algo a quien
nadie busca,
ni mira,
ni acecha
+++
Niñas que sueñan con vestidos
de novia y pechos crecidos
Mujeres que quieren volver a
ser niñas
Flores que lloran porque un
elefante les sorbió la risa
Renacuajos que eran y que sin
embargo no son ni serán
Nº de páginas: 72. Editorial La
Bella Varsovia 2019
La vergüenza
Sin ser una obra espléndida,
aborda con intensidad emocional el tema de los niños y familias adoptantes. Una
pareja que se enfrenta de forma muy diferente a una decisión importante. Se van
dosificando los datos y poco a poco nos introducimos en el drama de niños no
queridos, con trastornos de conducta y víctimas de Bull ying. No me convence la
parte de la trama relacionada con su madre biológica, creo que no se ha
incluido de forma acertada y le resta valor a la fuerza argumental. A destacar
la recta final donde salen numerosos asuntos sin resolver en la pareja y unos
cuantos secretos o cuestiones no habladas.

Sinopsis Pepe y Lucía no pueden con Manu.
Lo han intentado todo, pero es inútil: el niño que adoptaron hace apenas un año
les viene grande, no se hacen con él, y han decidido devolverlo. Sin embargo
pronto se dan cuenta del precio que deberán pagar si quieren seguir adelante
con su plan... Ópera prima de David Planell, guionista nominado al Goya por
"Siete mesas de billar francés" (co-escrito con Gracia Querejeta) que
ha trabajado en algunas de las series más exitosas de la parrilla televisiva
española (Hospital Central, El comisario, MIR, etc.) y creador de conocidos
cortometrajes.
Dirección y
guion David Planell. Música Christopher Slaski. Fotografía Charly Planell. Reparto Alberto San Juan, Natalia Mateo, Marta Aledo, Norma Martínez, Esther Ortega, Brandon Lastra. España 2009, 107 min. Festival
de Málaga: Mejor película y Mejor Guión