sábado, 18 de mayo de 2024

Smoke

Smoke

Empezaba mayo con la noticia del fallecimiento de Paul Auster. Es el escritor del que más libros hay en mi casa. Lo admiro mucho, y de pronto surge el deseo de leer sobre su vida. Diario de invierno recoge parte de sus recuerdos desde su infancia. Me lo recomienda una buena amiga, y a partir de ahí comienza una maravillosa experiencia de lectura conjunta.

Estas semanas han aparecido en prensa y redes sociales numerosas menciones al autor y a esta película que, en su momento, me cautivó. Con algo de miedo a la desilusión, empiezo a verla y desde los primeros segundos surge poderosa aquella magia.

Contar y escuchar historias. El estanco, centro de encuentros, de vidas cruzadas. Mucho tabaco y el cálculo del peso del humo. Una esquina a las 8 de cada mañana, la misma y siempre diferente.

Aporrear un viejo aparato de TV para recuperar esa imagen rayada. Una bolsa de papel oculta tras los libros, dinero que se mueve desde el robo, a cancelar una deuda, al sentimiento de altruismo dirigido a un amor del pasado, tal vez idealizado.

El embuste es un arte”. Mentiras que provocan felicidad. Robar a quien roba. Un cuento de navidad, la grandeza de Keitel, la cámara que se incrusta en su rostro; nos lleva a esa casa, ante esa abuela ciega, dispuesta a creer, porque es navidad y está sola. Imágenes en blanco y negro como cierre y una huella visual para recordar ese cuento del que no queremos salir. Soñamos mientras Tom canta.


Grandes interpretaciones, diálogos para quienes amamos a Auster. Personajes amigos y queridos. Ese Nueva York donde se tejen relaciones estrechas de barrio. Sublime.

Sinopsis: Brooklyn, verano de 1987. Algunas personas que frecuentan el estanco de Auggie Wren (Harvey Keitel) le confían sus problemas. La rocambolesca historia de cómo consiguió su cámara fotográfica y de por qué se decidió a elaborar su singular colección de fotografías le dará por fin un argumento a Paul Benjamin (William Hurt), un prestigioso novelista que atraviesa una crisis. Por su parte, Paul ayudará a Rashid (Harold Perrineaud Jr.), un adolescente negro bastante desorientado que busca a su padre (Whitaker).

Dirección Wayne Wang. Guion Paul Auster. Reparto: Harvey Keitel, William Hurt, Harold Perrineaud Jr., Stockard Channing, Forest Whitaker. Música Rachel Portman. Fotografía Adam Holender. Estados Unidos 1995, 112 min. Festival de Berlín: Oso de Plata - Premio Especial del Jurado. Premios David di Donatello: Mejor actor extranjero (Keitel). Premios Independent Spirit: Mejor guión novel. Premios del cine Alemán: Mejor película extranjera.

Puedes verla íntegra desde AQUÍ (versión doblada al castellano).





2 comentarios:

ethan dijo...

Muy buena película, codirigida entre Wang y Auster (el escritor dirigió alguna más). También he leído "Diario de invierno" y también me gustó. Como se suele decir: nos quedarán sus libros.
Abrazos!

LU dijo...

Etham

Seguiré avanzando entre sus libros. Me quedan unos cuantos por descubrir, y siempre resulta una experiencia muy especial.

Hizo cine y en sus noveles y textos autobiográficos cuenta con esa maestría argumentos o escenas de películas.

Esta misma mañana recordaba una entrada que publiqué con dos películas que cita en una de sus novelas:
Siguiendo los comentarios entre nieta y abuelo del libro de Paul Auster, “Un hombre en la oscuridad”, reviso dos de las películas a las que ellos se refieren, para darle forma a su teoría sobre el papel de los “objetos inanimados como medio de expresar emociones humanas”.

https://tartarugamxica.blogspot.com/2008/12/desde-el-sof-de-una-novela.html