Caos calmo de Sandro Veronesi

Caos calmo

Sandro Veronesi

Impactada durante el tiempo dedicado a esta lectura, a sorbos.

Con voz poderosa, el hombre que narra en primera persona lo sucedido aquel día de verano. La decisión que toma, suponemos que sin reflexionar demasiado, y algo que al principio parece no se prolongará por mucho tiempo.

Entre sus compañeros, se convierte en el tema predominante de conversación. Todos opinan. Su familia se preocupa. Su hija saluda desde la ventana y no muestra extrañeza, tampoco expresa emociones dolorosas.

Pronto se irá acercando una colección de personajes cargando con su propio sufrimiento, y encontrando en su escucha cierto alivio.

Empezamos a sentir que tal vez su postura ante lo sucedido, ante sus prioridades, ante la vida; sea la más cuerda.

La sociedad y el mercado económico, las grandes empresas y sus extrañas fusiones. Sus trabajadores, los todopoderosos y los que buscan otro camino muy lejos, los que desaparecen tras confundir una pieza de su ordenador.

El hermano, el éxito y los celos. Su padre lejos y camino de la ruptura con lo que acontece. Su cuñada, tan guapa, en desequilibrio, embarazada. Su pareja, no tan feliz, con secretos. La mujer revivida y el deseo. La chica y el perro. El vecino que se va a mudar.

Desde el surrealismo a la reflexión. Desde la tragedia al humor. Desde la niña al adulto. Me ha encantado y me he reído.

¿Se puede sentir serenidad en medio del caos? 

• 𝚂𝚒𝚗𝚘𝚙𝚜𝚒𝚜 •

 La vida de Pietro Paladini sufre una terrible convulsión un día de finales de verano en que, mientras está a punto de morir ahogado al salvar a una desconocida, pierde a la mujer con la que iba a casarse en pocos días. Con una variedad de registros que van desde el e-mail hasta el vivo diálogo entre generaciones, desde el monólogo reflexivo hasta la prosa erótica más encendida, Sandro Veronesi plasma en esta novela el caos de nuestras ciudades multiformes, de nuestras familias en crisis, de una economía fundada no ya en el valor del trabajo, sino en la pura especulación. Sandro Veronesi (Florencia en 1959). Con esta obra obtuvo el Premio Strega, el más prestigioso galardón de las letras italianas.

Nº de páginas: 512. Editorial Anagrama, 2013. Traductor: Xavier González Rovira. Así empieza esta novela.