Después de haber pasado unos años viajando, Antoine
Roquentin, hombre de 30 años que disfruta de una modesta renta, se halla
instalado en la ciudad portuaria de Bouville dedicado a escribir un libro sobre
un turbio aristócrata del siglo XVIII. Sin embargo, un día se ve asaltado por
una sensación desconocida, la Náusea, cuya revelación como el sentimiento
radical de la contingencia y la soledad del ser humano cambiará por completo su
vida de sentido. Publicada en 1938, es, junto con "El extranjero" de
Albert Camus, la novela que encarna de forma más emblemática la corriente de
pensamiento existencialista fruto de la atroz experiencia de la Primera Guerra
Mundial y sus funestas consecuencias.
Nº de páginas: 288 págs.
Editorial: ALIANZA EDITORIAL
ISBN: 9788420652764
Alguien que está atrapado en sus rutinas. Observador desde
su atalaya. Soledad apenas compartida con un compañero de biblioteca, el
autodidacta. Recuerdos de un amor que a ratos remueven la memoria y las
emociones.
Sueño basándome en palabras.
Para que el suceso trivial y más corriente se convierta en
aventura es necesario contarlo.
Creo que en este momento de mi vida no era un libro
adecuado. Me ha costado seguirlo. Necesito novelas, literatura para desconectar
y relajarme.
Un texto para reflexionar.
Si tuviera que vivir mi vida de nuevo, la próxima vez me
atrevería a cometer más errores. Me relajaría, me prepararía, sería más tonta
de lo que he sido en este viaje. Me tomaría menos cosas en serio, aprovecharía
más oportunidades, emprendería más viajes, subiría más montañas y nadaría en
más ríos. Comería más helados y menos guisantes. Quizá tendría más problemas
reales, pero muchos menos imaginarios. Soy una de esas personas que fueron
sensibles y cuerdas, hora tras hora, día tras día.
Oh, tuve mis momentos. Si tuviera que hacerlo de nuevo,
tendría más de esos momentos. De hecho, intentaría que no hubiera de otra cosa,
sólo momentos, uno tras otro, en lugar de vivir tantos años por delante de cada
día. He sido una de esas personas que nunca van a ninguna parte sin llevar un
termómetro consigo, una botella de agua caliente, un impermeable y un paraguas.
Si pudiera volverlo a hacer, viajaría
mucho más ligera de equipaje.
Si tuviera que volver a vivir mi vida, me quedaría con los
pies desnudos antes en la primavera, y permanecer y así hasta más avanzado el
otoño. Iría a más bailes, me dejaría
llevar por más rondas alegres y recogería más margaritas.
Nadine Stair
Una versión sorprendente y fascinante del Blue Monday de New
Order
No hay comentarios:
Publicar un comentario