lunes, 2 de octubre de 2017

El arte de amargarse la vida + La procrastinación eficiente + Música Feel Good + Un galeón

El arte de amargarse la vida de Paul Watzlawick


Todo un clásico. Pocas páginas, llenas de humor e infinidad de ideas que pueden provocar la infelicidad. Porque por mucho bombo y platillo que le queramos dar a la FeLiCiDaD, la realidad no siempre es sobrevolar tranquilamente sentada en una esponjosa nube rosa, con un coctel en la mano y la sonrisa perfecta de selfie. Te vas a reir si lo lees, del texto, y de ti mism@. Porque somos especialistas en amargarnos por pequeñeces.

“Sentado en tu silla, cierra los ojos y lleva la atención a tus zapatos. En poco tiempo notarás lo incómodo que es estar calzado. Independientemente de lo bien que te quedasen hasta ahora, en este momento comenzarás a notar zonas donde se ciñen demasiado, y sensaciones de malestar como frío, calor, dedos encogidos, rozamientos, etc. Practica hasta que el hecho de llevar zapatos se vuelva decididamente poco cómodo. Sal a la calle, cómprate otro calzado y date cuenta de que, aunque te quedaba perfecto en la tienda, en poco tiempo te ocasiona el mismo malestar”.

«Un hombre quiere colgar un cuadro. El clavo ya lo tiene, pero le falta un martillo. El vecino tiene uno. Así pues, nuestro hombre decide pedir al vecino que le preste el martillo. Pero le asalta una duda: ¿Qué? ¿Y si no quiere prestármelo? Ahora recuerdo que ayer me saludó algo distraído. Quizás tenía prisa. Pero quizás la prisa no era más que un pretexto, y el hombre abriga algo contra mí. ¿Qué puede ser? Yo no le he hecho nada; algo se habrá metido en la cabeza. Si alguien me pidiese prestada alguna herramienta, yo se la dejaría enseguida. ¿Por qué no ha de hacerlo él también? ¿Cómo puede uno negarse a hacer un favor tan sencillo a otro? Tipos como éste le amargan a uno la vida. Y luego todavía se imagina que dependo de él. Sólo porque tiene un martillo. Esto ya es el colmo. Así nuestro hombre sale precipitado a casa del vecino, toca el timbre, se abre la puerta y, antes de que el vecino tenga tiempo de decir: "buenos días", nuestro hombre le grita furioso:"¡Quédese usted con su martillo, so penco!”

Nº de páginas: 144 págs.
Editorial: HERDER, Barcelona 2003
ISBN: 9788425423307
Traductor: XAVIER MOLL

La procrastinación eficiente. Guía para dar largas, pensar en las musarañas y posponer todo de manera productiva.
John Perry


Otro librito con mucha miga y gran sentido del humor. Si eres de los que deja todo para el último segundo, o, "ya lo haré mañana….”, no dudes en echar un vistazo a estas páginas. No te sentirás culpable, y además le sacarás partido a un supuesto defectillo.

"Para ser eficiente siempre debes trabajar en algo importante que te sirva de excusa para no hacer algo aún más importante".

“El que tal vez sea el bien más preciado de los procrastinadores es la posibilidad de conseguir hacer cosas sorprendentes y maravillosas sin atenerse a una agenda prefijada”.

“Casi todos los procrastinadores tienen una capacidad excelente para el autoengaño”.

Uno de mis apartados favoritos, es ponerle banda sonora:

“La música adecuada puede ayudar mucho.
Pero hay un problema: la música equivocada puede empeorar las cosas. Cuando estás deprimido y te mueves lentamente necesitas escuchar Start me up de los Rolling Stones o Respect de Aretha Franklin o, si sigues fiel a Johnny Cash, Tennessee flat top. No nos ayuda nada oírle cantar Hurt, su canción sobre herirse a sí mismo para ver si todavía puede sentir dolor.
Escoge una emisora alegre, pon el volumen muy alto, coloca la radio despertador a una buena distancia de la cama y la música para que te pongas en marcha. No seríamos capaces de tomar estas decisiones por la mañana, pero sí que podemos tomarlas la noche anterior.
Podemos preparar una lista de canciones que creemos que nos ayudarán a empezar con buen pie. Tenemos que elaborar la lista en algún raro momento que estemos de un humor relativamente bueno y optimista.
Toma la resolución de empezar y seguir trabajando todo el tiempo que dure tu CD favorito. Mejor aún, haz una lista de melodías alegres y vigorizantes, especiales para limpiar el garaje, por ejemplo”.

¿Qué te parece? Yo ya tengo mi lista de canciones que se titula Feel Good.


Nº de páginas: 128 págs.
Editorial: EMPRESA ACTIVA, 2012
ISBN: 9788496627475
Traductor: MARÍA ISABEL MERINO SÁNCHEZ

Réplicas de aquellos navíos que vivían tremendas odiseas, sin GPS. Zarpamos!!!






2 comentarios:

Fran dijo...

Que tal LU!
Interesantes (como de costumbre) las reseñas de lectura. Al hilo de lo que comentas sobre la música, le estoy dando vueltas a si utilizar un fondo musical para cierta situación en la que tendré que hablar en publico. No se como lo ves, es una boda, ya sabes, en las pelis queda muy bien pero luego en la vida real la cosa cambia.
Muy chulas las fotos del navío. La verdad que había que tener valor para surcas los mares en esas condiciones.
Feliz semana, bicos:)

LU dijo...

Hola Fran. La música evoca ya de por sí muchas sensaciones y recuerdos. Creo que utilizarla podría ser una estupenda idea, siempre que puedas hacer una prueba de volumen y esas cosas.

Intrépidos aventureros. Ahora o vamos equipados con las más sofisticadas tecnologías, o no nos subimos ni a un bote de remos por la Ría en un mañana tranquila y de aguas calmas, jajaja

A disfrutar de este veranillo y de las nieblas que tantos recuerdos de infancia me traen.

Bicos