Ya estamos en la segunda quincena de octubre y todavía está la ropa de verano sin guardar. Sol, mucho sol. El viernes por la tarde un paseo por la playa sobre la arena mojada, con buena música (Mayland y Milknaut, vigueses ambos) y para acabar, un delicioso café con hielo en una terraza con vistas a las islas Cíes.
48 horas después, cual avalancha, entra por el noroeste de la península un temporal. Tarde de domingo de fuertes lluvias y vientos. Mi lado más práctico (y vago) propone reunión en casa. La excusa perfecta, una película. La mesa se llena de chuches deliciosas y toca elegir algo a gusto de todos.
Río
Blu es un guacamayo que apenas guarda recuerdos de su breve infancia en libertad. Siempre ha estado con Linda, quien lo adora y mima al máximo. Ambos son felices, hasta que un día aparece por la librería que regenta ella, un chico muy interesado en cruzarlo con una hembra de su especie, ya que ambos son los últimos ejemplares vivos. Primero rechaza la idea, que conlleva desplazarse a Brasil, pero tras consultarlo con la almohada, deciden ir. En Río vivirán numerosas y peligrosas aventuras entre los animados carnavales y una mafia que se dedica al tráfico de aves exóticas.
De los creadores de Ice Age, preciosas imágenes de los pájaros, en especial de los guacamayos azules, con momentos divertidos, de acción dinámica y entretenida. Dos mundos diferentes: el de la mascota (animal de compañía es la definición que prefiere Blu), y el que vive en su hábitat; las personas que hacen negocios sin escrúpulos con los animales y las que cuidan de ellos y los protegen.
HACE UN AÑO Y UN DÍA: A jugar y a disfrutar
2 comentarios:
Aquí ha cambiado también el tiempo, así que me apunto la proposición para algún día que no apetezca salir y los menudos anden por casa.
Pepe, en mi casa triunfó.
Biquiños desde el final del primer temporal de otoño
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