Segundo cumpleaños

Toda esta aventura arranca en noviembre del 2007, a golpe de un impulso, sin el más mínimo propósito de longevidad (a pesar del animal elegido para dar nombre a este blog). La constancia y la continuidad no son mis mejores credenciales. Incluso podía haber apostado, segura de ganar, que esto no llegaba hasta aquí, ni de broma (ni en serio). Me equivocaba, rectifico, y sonrío.

Me gusta escribir. Durante largo tiempo era la mejor opción para vencer la timidez y poder expresar todo lo que verbalmente me resultaba complicado. Largas cartas dirigidas a la familia y amigos que no estaban a mi lado, formaban una deliciosa costumbre. Elegir folios, sobre y el color de la tinta del bolígrafo. Recrear las sensaciones producidas por una película, una canción, un concierto, un libro. Detallar conversaciones, vivencias, sentimientos o deseos. Soñar con amores apasionados, con viajar, con no parar, con vivir pisando el acelerador, con un trabajo creativo y altamente motivante… Maravillosa inocencia.

El ordenador y los correos electrónicos vencen a los manuscritos; con la misma reserva que el CD al vinilo, con sentimiento inicial casi de traición, pero con una posterior rendición absoluta. Merodear por internet va ganando terreno y la posibilidad de crear un blog va tomando forma.

Disfruto como una enana pensando en las entradas que voy a hacer, redactando los textos (unas veces largos y otras telegráficos. Si algo me entusiasma, se disparan los dedos sobre el teclado), buscando en la red, en otros blogs, vídeos e imágenes para completar.

Ha aumentado de forma considerable el proceso de intercambio, con los comentarios y respuestas. Se abre un diálogo que aporta opiniones parecidas u opuestas; que enriquece.

Estoy convencida de que sin vosotros no serían posibles estos dos años en la red y, por eso, y por todo lo bueno que esta experiencia me está aportando, quiero daros a todos las gracias.

GRACIAS



HACE UN AÑO: Primer año