Para todos

Recientemente he tenido la oportunidad de ver dos películas de dibujos que, además de divertir a los más pequeños de la casa, denuncian los daños irreversibles que le estamos causando al medio ambiente.

Historia de una gaviota y del gato que le enseñó a volar
Ficha técnica

Si el cuento de Luís Sepúlveda (enlace) me fascinó, la adaptación al cine resulta entretenida. Incorpora personajes nuevos, pero en lo esencial es fiel al texto. Hermoso mensaje de respeto hacia los demás, de compañerismo y una llamada de atención sobre la imparable contaminación del mar.


Happy feet (rompiendo el hielo)
Ficha técnica

Peripecias de un pingüino sin talento para cantar, habilidad que se les presupone innata dentro de su comunidad. Él prefiere bailar, pero para los demás ese extraño movimiento de pies, es señal de un una anomalía.

Crítica hacia las actitudes radicales, hacia lo que no es considerado normal. Líderes que abusan de su posición, chamanes con poderes otorgados por los dioses que engañan a sus súbditos, el dominio de las masas, la rebeldía de los jóvenes, el estigma, el rechazo, la vergüenza, las formas diferentes de afrontar la vida... Un reflejo de parte de los grandes males de nuestra sociedad.

Se lanza un SOS sobre la situación de la Antárdida, donde viven los pingüinos emperadores, tema que abordó de forma magistral El viaje del emperador (el documental más brillantes que yo conozco), y que sirve como punto de partida para este trabajo de animación, dirigido a sectores mucho más amplios de público.

Trailer de El Viaje del emperador:

Pepe le dedica una maravillosa entrada (enlace).