Durante unos cuantos viajes de tren me ha acompañado “La elegancia del erizo” de Muriel Barbery, y ha hecho mucho más llevadera mi ansia por llegar puntual, objetivo que para la RENFE resulta totalmente irrelevante, y que durante todo este año no han conseguido NI UN SOLO DÍA. Busco estrategias de relajación, en la música, y ahora en la lectura. He aprendido a evadirme, a pasar por alto los anuncios de las estaciones, las conversaciones ajenas, y, lo más importante, a no mirar obsesivamente el reloj.
Si a estos grandes beneficios, añadimos la diversión, pues resulta totalmente gratificante.
Una portera de un elegante edificio se esmera continuamente por aparentar, por encajar a la perfección dentro de los arcaicos estereotipos atribuidos a su profesión. Los vecinos, burgueses, y residentes en sus viviendas de lujo consideran a esta mujer como un elemento meramente funcional.
En uno de estos grandes pisos, Paloma también se esconde, de su familia, en cualquier rincón, y bajo una careta que se va construyendo. Se refugia en su diario.
Dos almas gemelas destinadas a comprenderse. Será la llegada de un nuevo propietario quien desenmascare a ambas.
Me ha gustado muchísimo, me he reído con ganas, me ha enganchado desde las primeras líneas.
Si a estos grandes beneficios, añadimos la diversión, pues resulta totalmente gratificante.
Una portera de un elegante edificio se esmera continuamente por aparentar, por encajar a la perfección dentro de los arcaicos estereotipos atribuidos a su profesión. Los vecinos, burgueses, y residentes en sus viviendas de lujo consideran a esta mujer como un elemento meramente funcional.
En uno de estos grandes pisos, Paloma también se esconde, de su familia, en cualquier rincón, y bajo una careta que se va construyendo. Se refugia en su diario.
Dos almas gemelas destinadas a comprenderse. Será la llegada de un nuevo propietario quien desenmascare a ambas.
Me ha gustado muchísimo, me he reído con ganas, me ha enganchado desde las primeras líneas.
A punto de terminarlo, estrenan la adaptación al cine: El erizo (Mona Achache, Francia 2009) y decido verla, asumiendo el riesgo. Ya lo he dicho varias veces, y realmente no puedo evitar hacer comparaciones. Una vez más, la película está muy por debajo del texto original. Con un tono triste, y unas cuantas lagunas, no alcanza la complicidad con el espectador.
HACE UN AÑO: Radiohead – Daydream Festival
10 comentarios:
Me sorprendes... hasta el 31 de diciembre al pie del cañón.
Feliz 2010.
Un besazo
Feliz 2010 de corazón, galleguiña.
Muchos libros, mucho cine y mucha felicidad para 2010
Miguel, esta tartaruga es muy trabajadora, y tiene una opción fantástica de programar entradas (no se lo cuentes a nadie, cada vez hago más “trampas”).
Te deseo también un excelente 2010.
Biquiños
Pepe, FELIZ 2010, y que esto no se quede en un deseo más, sino que se cumpla.
Biquiños
Jack, mucho de todo, de todo lo bueno para ti.
Biquiños
No tengo el placer de conocer el libro (aunque me encantaría!), pero vi la película ayer y quedé encantadísima.
Gaviota, no se trata de comparar formas de manifestación artísticas diferentes, pero cuando leo primero un libro y después veo la película, creo que exijo demasiado de la adaptación de cine si el libro me ha gustado. Basta con que supriman algo o cambien cosas, para que me desilusione. Estoy convencida que si no hubiera leido la novela, la película me habría gustado mucho más.
A mi me pasa lo mismo...Por eso suelo leer los libros luego de su adaptación cinematográfica o, en su defecto, ver la versión cinematográfica bastante tiempo después que leí el libro :-D
Eso es lo ideal, pero a veces hago lo contrario, y pasa lo que pasa
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