martes, 24 de mayo de 2011

Paraíso inhabitado – Ana María Matute

Nací cuando mis padres ya no se querían. Cristina, mi hermana mayor, era por entonces una jovencita displicente, cuya sola mirada me hacía culpable de alguna misteriosa ofensa hacia su persona, que nunca conseguí descifrar. En cuanto a mis hermanos Jerónimo y Fabián, gemelos y llenos de acné, no me hacían el menor caso. De modo que los primeros años de mi vida fueron bastante solitarios.

Uno de mis recuerdos más lejanos se remonta a la noche en que vi correr al Unicornio que vivía enmarcado en la reproducción de un famoso tapiz. Con asombrosa nitidez, le vi echar a correr y desaparecerpor un ángulo del marco, para reaparecer enseguida y retomar su lugar; hermoso, blanquísimo y enigmático.

Así comienza este libro. Si quieres leer las primeras páginas pincha aquí.

Adri recuerda su infancia entre los olores de pucheros y las tatas. Asiste a un colegio de monjas donde se siente extraña, rara y mala. En su casa su familia le da la espalda. Sus mejores recuerdos están asociados a su tía Eduarda, a su padre que la lleva a una sesión doble de cine, a sus libros y, sobre todo, a Gavi, ese ángel de tirabuzones rubios.

Entrañable y fiel a su estilo, aunque reconozco que este tipo de historias, ahora mismo, no me seducen demasiado.



HACE UN AÑO: Bailando, saltando y cantando

2 comentarios:

Manderly dijo...

Nunca he leído nada de Matute ni estoy al día de su obra.
La tengo por descubrir...
Un saludo.

LU dijo...

Manderly, a mi me gusta mucho descubrir escritores de los que nunca he leído nada. Hay tantos.

Biquiños de domingo de tormenta.