En la contraportada, en palabras del autor:
“La verdad del Caimán es ciertamente mi historia. Tanto es así que en Padua, cuando salió el libro, se armó un escándalo porque la gente reconocía por la calle a los personajes y los señalaba…"
El gran amor de mi vida ya lo había encontrado, pero me dejó mientras cumplía mi último año en régimen abierto. Me escribió una carta desde Bretaña; pocas líneas: "me quedo aquí. Otro país, otra vida, otro hombre. Ya no te quiero y te olvidaré. Buena suerte..."Creí que me volvía loco y en cuanto pude me fui a buscarla. Estaba seguro de que la convencería para que volviese conmigo. La encontré en una taberna de Brignogan, comiendo ostras y bebiendo chablis en compañía de un tío que no se parecía nada a mí. Ni me vio entrar. Estaba demasiado ocupada en estar enamorada. Me di cuenta de que se había quitado un zapato y su pie acariciaba una pierna del hombre.Me acerqué a la barra. Tenía las mandíbulas tan apretadas que no logré pedir nada. El camarero me miró de arriba abajo, luego me sonrió y me puso delante un lingotazo de un licor color ámbar.Me temblaban las manos y tuve que llevarme el vaso a los labios con las dos. Bebí a pequeños sorbos. Me sentí mejor. Mucho mejor.
-¿Qué es? - pregunté, señalando la botella.
-Calvados -contestó, con aire de complicidad.
El Calvados es la herencia de ese amor, lo bebe como el agua. Escucha blues y se dedica a labores detectivescas. Ha pasado unos años en la cárcel y el no abrir la boca para reducir condena le granjea el apoyo del hampa. Primera entrega de las aventuras de Marco Buratti, que recibe el encargo de encontrar a un preso en régimen abierto que se ha fugado.
Asesinatos, culpable condenado en base a pruebas poco fiables, la historia que se repite y los poderosos que se creen intocables, cadáver congelado, prácticas de sadomasoquismo, chantajes y, ante todo, descubrir toda la verdad.
Pura acción, repleta de energía y de unos personajes fantásticos, tanto los protagonistas - Marco y su compinche “el viejo Rossini” - como el resto del elenco.
“La verdad del Caimán es ciertamente mi historia. Tanto es así que en Padua, cuando salió el libro, se armó un escándalo porque la gente reconocía por la calle a los personajes y los señalaba…"
El gran amor de mi vida ya lo había encontrado, pero me dejó mientras cumplía mi último año en régimen abierto. Me escribió una carta desde Bretaña; pocas líneas: "me quedo aquí. Otro país, otra vida, otro hombre. Ya no te quiero y te olvidaré. Buena suerte..."Creí que me volvía loco y en cuanto pude me fui a buscarla. Estaba seguro de que la convencería para que volviese conmigo. La encontré en una taberna de Brignogan, comiendo ostras y bebiendo chablis en compañía de un tío que no se parecía nada a mí. Ni me vio entrar. Estaba demasiado ocupada en estar enamorada. Me di cuenta de que se había quitado un zapato y su pie acariciaba una pierna del hombre.Me acerqué a la barra. Tenía las mandíbulas tan apretadas que no logré pedir nada. El camarero me miró de arriba abajo, luego me sonrió y me puso delante un lingotazo de un licor color ámbar.Me temblaban las manos y tuve que llevarme el vaso a los labios con las dos. Bebí a pequeños sorbos. Me sentí mejor. Mucho mejor.
-¿Qué es? - pregunté, señalando la botella.
-Calvados -contestó, con aire de complicidad.
El Calvados es la herencia de ese amor, lo bebe como el agua. Escucha blues y se dedica a labores detectivescas. Ha pasado unos años en la cárcel y el no abrir la boca para reducir condena le granjea el apoyo del hampa. Primera entrega de las aventuras de Marco Buratti, que recibe el encargo de encontrar a un preso en régimen abierto que se ha fugado.
Asesinatos, culpable condenado en base a pruebas poco fiables, la historia que se repite y los poderosos que se creen intocables, cadáver congelado, prácticas de sadomasoquismo, chantajes y, ante todo, descubrir toda la verdad.
Pura acción, repleta de energía y de unos personajes fantásticos, tanto los protagonistas - Marco y su compinche “el viejo Rossini” - como el resto del elenco.
2 comentarios:
¿Con pura accion te referis a que hay tiroteos y persecuciones?
Lo de tiroteos y persecuciones me recuerda a las series de TV policiacas de hace unos años; donde si no había 3 o 4 persecuciones imposibles, con miles de tiros que evidentemente no daban en el blanco, parecía que no había acción.
No, me refiero a:
Asesinatos, culpable condenado en base a pruebas poco fiables, la historia que se repite y los poderosos que se creen intocables, cadáver congelado, prácticas de sadomasoquismo, chantajes y, ante todo, descubrir toda la verdad.
A mi me gustó
Gracias por el comentario
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